Cuando llega lo que tanto esperas, es difícil explicar cómo te sientes.
Un poco de mariposas en el estómago, y por qué no también algo de ansiedad y nervios.
Los sentimientos son extraños, confunden y engañan a cualquiera. Sonreír demasiado puede poner a la vida celosa, y buscar que te traiga unas cuantas lágrimas sólo para establecer ese equilibrio que le parece tan sagrado.
Tanta maravilla a veces nos hace soñar más de la cuenta, e imaginar aquello que estaba prohibido. Quisiera que pudieras entender todo lo que pasa por mi mente y mi corazón; te aseguro que no es demasiado... Sin embargo, son pensamientos y sentimientos fuertes, únicos y apasionados.
Decepción.
Sé que las cosas son diferentes ahora, pero permaneces por alguna extraña razón. Reconozco que no sólo te quiero, en definitiva es algo más que eso.
Todas las canciones me hacen pensar en ti, extrañarte me hace permanecer en un constante estado de estupidez. No puedo tener nada más en la cabeza cuando estás tú y lloro despacio para que nadie note que más allá de tu partida, sigues en mí.
Estoy perdida... No sé a dónde se dirigen mis sueños...
Pero me declaro culpable: Por andar llenando el corazón de polvo de hadas, por construirme castillos demasiado altos, por pasear en bosques encantados y andar buscando un príncipe entre tanto ser humano.
Sabías que: Una persona promedio dice cuatro mentiras al día, 1460 en un año. De esas aproximadamente 87.600 mentiras que habrás dicho para cuando tengas 60 años, la más común habrá sido "Estoy bien".
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